Eran exactamente las 11,28 horas de la matinal sabatina cuando su compañero de grupo Gerardo Pérez de Vargas, como presidente de la Mesa de Edad, entregaba a Lago la medalla de concejal y el bastón que simboliza el mandato que ejercerá en la ciudad durante los próximos cuatro años. Tan sólo diez minutos después, tras imponer personalmente las medallas e insignias a los 24 concejales restantes, Gonzalo Lago pronunciaba sus primeras palabras como nuevo alcalde de Talavera, el segundo del PP que tiene la ciudad en el periodo democrático y el primero de su partido que gobernará en mayoría.
Significativa e importante circunstancia de gobernabilidad que, sin embargo, no fue óbice para que Lago trasladase un mensaje de agradecimiento, concordia, mano tendida, cercanía, eficacia y accesibilidad municipal; asegurando que, con su toma de posesión como alcalde de la ciudad, firma “un contrato de servicio con Talavera y con todos los talaveranos, hayan votado a quienes hayan votado”. Un contrato que confiesa asumir con “responsabilidad”, pero también con “ilusión y ganas de trabajar por Talavera, mi ciudad, la ciudad en la que nací, en la que me casé, la ciudad en la que han nacido mis hijos y en la que he podido desarrollar mi actividad profesional como médico de familia y que me ha permitido una relación cercana con muchos, muchísimos talaveranos”.
Afirmaciones como “quiero ser el alcalde de todos y para todos”, “digo equipo de Gobierno por responsabilidad, la responsabilidad que ahora nos corresponde ejercer, pero en realidad quiero decir Corporación Municipal, porque a los veinticinco concejales corresponde la tarea que hoy iniciamos”, o “tiendo mi mano a todos los que quieran cogerla y esta mano siempre estará tendida y abierta de corazón para que entre todos consigamos lo mejor para Talavera”, corroboran el talante aperturista, conciliador y de esfuerzo común con que Lago se presentó ante una sociedad talaverana a la que designó como “protagonista del funcionamiento de las instituciones” y a la que prometió cercanía, solvencia y participación.
Lago aseguró que “queremos que nuestro Ayuntamiento sea una administración capaz de dar respuestas solventes a las demandas de los talaveranos, por lo que una de mis primeras medidas va a ser crear un área de especial atención al ciudadano, en la que me implicaré personalmente, de tal forma que siempre que un talaverano venga a este Ayuntamiento habrá un concejal dispuesto a atenderle personalmente". Para ello, pidió a los empleados públicos “ayuda sincera y confiada" para “solucionar los problemas de nuestros vecinos” y conseguir que sus demandas “vayan por delante de la burocracia y no al revés”.
Una llamada al compromiso y al esfuerzo de todos que Lago fundamentó en “los delicados momentos que atravesamos, exigiendo la actual situación financiera y laboral que todos seamos exquisitamente responsables en la administración del dinero de los talaveranos con una meditada planificación, racionalización y control del gasto público”. En este sentido, el alcalde apeló a la “honradez, la eficacia y la transparencia” como señas de identidad de un Gobierno que “gastará o invertirá cada euro de los talaveranos en lo estrictamente necesario, obviando el gasto superfluo”, asegurando que son tiempos de "apretarse el cinturón”, de “hacer más con menos” y de actuar con “una austeridad de la que ya hemos dado ejemplo, al reducir el número de concejales liberados a cargo del Ayuntamiento”.
El flamante alcalde reconoció, asimismo, que el objetivo prioritario de la ciudad es “la creación de empleo”, asegurando al respecto que cada acción política de su Gobierno irá encaminada a “potenciar la economía de Talavera y crear empleo”, porque “no nos resignarnos a seguir siendo la ciudad con más tasa de desempleo de Castilla-La Mancha”.
Una lacra, la del paro, que Lago recordó que afecta principalmente a los jóvenes, -”el futuro de la ciudad”- y a las mujeres, asegurando a este último respecto que “el paro femenino es insostenible” y que “no se podrá hablar de verdadera igualdad hasta que no solucionemos este drama”. Entre los proyectos para luchar contra el paro y reactivar la ciudad, el alcalde citó el AVE, el nodo logístico de transporte y la designación de Talavera como campus universitario, manifestando que “estos son los tres ejes sobre los que nuestra ciudad debe vislumbrar su presente y futuro”.
También estima “imprescindible” el nuevo alcalde que “Talavera, sus EATIMs y su comarca desarrollen la tan deseada y demandada Área Metropolitana, no sólo en materia de transporte, sino también en urbanismo, infraestructuras, medio ambiente y servicios” para hacer fuerza común en una causa talaverana y comarcal para la que Lago pidió “mayor financiación, para que podamos ofrecer los servicios que los ciudadanos demandan”. El nuevo regidor finalizó su primer discurso oficial recordando a todos los alcaldes que hasta el momento ha tenido Talavera y reiterando a los talaveranos que “aquí tienen a su alcalde, para lo que necesiten".


Los 25 concejales electos
1. Gonzalo Lago Viguera
2. Jaime Ramos
3. Alicia Godoy
4. José Julián Gregorio
5. Mª Angeles Núñez
6. Roberto González
7. Marisol Luqui
8. Gerardo Pérez de Vargas
9. Victoria González
10. Arturo Castillo
11. Ana Santamaría
12. Florencio Gutiérrez
13. María Rodríguez
14. José Luis Muelas
15. José Francisco Rivas
16. Ana Ballesteros
17. Carlos Gil
18. Agustina García
19. Carlos Angel Devia
20. Belén Flores
21. Miguel Perantón
22. Rosa María Bello
23. José Gutiérrez
24. Flora Bellón
25. José María Domínguez
Especial atención a los problemas cotidianos
Una de los aspectos más destacados del discurso que Gonzalo Lago pronunció el pasado sábado tras su toma de posesión como nuevo alcalde de Talavera, es el que hace referencia a su firme intención de acercar el Gobierno municipal a la ciudadanía y, dentro de esa dinámica, conceder a los problemas cotidianos de los talaveranos la misma importancia que tienen los grandes proyectos que la ciudad tiene que acometer para superar la delicada situación económica y laboral que atraviesa.
Aún reconociendo que el presente y el futuro de Talavera pasan por el AVE, el nodo logístico y la ampliación universitaria, Lago es consciente de que las "penalidades ciudadanas" también se nutren de los problemas, dificultades y trabas que los talaveranos encuentran diariamente en su cotidianidad.
Resolver estos pequeños problemas no asegura que Talavera salga del bache en que se encuentra, pero sí que los ciudadanos tomen consciencia de que sus vidas y sus circunstancias son, para el nuevo equipo de Gobierno, tan importantes y prioritarias como las vicisitudes de esos macroproyectos que, hasta ahora, parecían ser el único ser y sentir de Talavera. Y eso no es poco.

Otras imágenes de la solemne investidura



