Viernes 25 de Julio de 2014, 07:07 horas.
Un leve gesto, milagrosamente oportuno, salvó la vida a Angela Sánchez Oliva, la joven profesora de inglés gravemente herida por disparo de bala el pasado día 9, cuando transitaba por la calle Alfares de Talavera.
Así lo han confirmado a LaVozdeTalavera.com fuentes próximas a la investigación, añadiendo que, según todos los indicios, Angela salvó su vida “de milagro” al girar levemente su cabeza hacia el portal justo en el momento en que su presunto agresor, Adrián B.R., disparaba desde el interior.
Ese leve y oportuno gesto con el que Angela volvió la vista a su derecha, hacia el portal, que pudo ser debido a que viera o intuyera la presencia del joven en el interior del mismo o por un simple detalle de coquetería, quizás aprovechando el efecto reflejo del cristal para mirarse, fue el que le salvó la vida.
Al girar la cabeza justo en ese momento, la bala no alcanzó a Angela de lleno en su cabeza, cosa que hubiera resultado mortal, y sólo lo hizo superficialmente, en la zona parietal derecha, para acabar empotrándose en la parte inferior del escaparate de un local comercial situado enfrente, actualmente vacío.
Según han confirmado las mismas fuentes, Angela presenta una herida de bala en su hueso parietal exocraneal derecha, de aproximadamente dos centímetros de longitud, y pequeños trozos de cristal en torno a la misma, que habrían sido arrastrados por el proyectil que, antes de impactar en su cabeza atravesó la cristalera de la puerta del portal número 8 de Alfares, en el que la joven cayó fulminada.
Por supuesto, se descartan otras versiones que han circulado en los últimos días según las cuales Angela habría sido alcanzada por las esquirlas del proyectil disparado por Adrián B.R., que se habría descompuesto tras atravesar la cristalera y rebotar en la pared exterior del portal; lucubraciones “que carecen de fundamento”, según las fuentes consultadas por LaVozdeTalavera.com.
Y, si milagroso fue el gesto con el que salvó su vida, no lo es menos la evolución que el estado de salud de Angela Sánchez ha experimentado en los últimos días, en los que la fortaleza de la joven ha hecho que tras dos semanas de lucha haya vencido a la muerte.
Tras recuperar la consciencia, el habla y la respuesta a estímulos externos en la zona izquierda de su cuerpo, la más dañada de su sistema nervioso y motriz, la joven profesora de inglés ha iniciado su rehabilitación física y médica en el hospital Virgen de la Salud, de Toledo, en el que permanece ingresada desde el pasado día 9, primero en la UCI y desde el pasado fin de semana en una habitación de planta, acompañada de sus padres y recibiendo innumerables muestras de cariño y apoyo de familiares y amigos.
Mientras tanto, su agresor, Adrián B.R., de 20 años, sigue en prisión provisional, comunicada y sin fianza, en la cárcel de Ocaña, a la que el juez le envió acusado de tentativa de homicidio, amén de otros delitos relacionados con el arma que utilizó: un rifle que previamente había robado en un ático del edificio número 6 de la misma calle Alfares, colindante con el del portal desde el que se realizó el disparo que alcanzó a Angela.