Martes 26 de Junio de 2018.
El albacetense Manuel González Ramos es desde hoy nuevo delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, cargo del que ha tomado posesión este martes en un acto que ha tenido lugar en Toledo y que ha contado con la asistencia del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; el presidente de las Cortes autonómicas castellano-manchegas, Jesús Fernández Vaquero; el presidente de la Diputación Provincial toledana, Álvaro Gutiérrez; y la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, además del expresidente de Castilla-La Mancha y actual diputado nacional, José María Barreda. entre otros.
Natural de la localidad albacetense de Tinajeros, González Ramos es doctor en Ingeniería Agrónoma, licenciado en Economía, licenciado en Administración y Dirección de Empresas y profesor-tutor de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED). Funcionario del Cuerpo Superior de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, ha sido delegado provincial de Agricultura y Medio Ambiente desde 2001 hasta 2004 y delegado provincial de la Junta en Albacete hasta 2007 y subdelegado del Gobierno en Albacete hasta 2011.
Desde 2011 a la actualidad, González Ramos ha representado a la provincia de Albacete como diputado nacional por el PSOE, además de haber desempeñado la función de portavoz de Agricultura en la Comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente en el Congreso de los Diputados.
UNIDAD CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA
Tras prometer su cargo, en el que sustituye al talaverano José Julián Gregorio, González Ramos ha apelado a la unidad de la sociedad para acabar con la violencia machista, advirtiendo que "¡ya está bien, ni una más!" y añadiendo que "como sociedad tenemos que unirnos todos y todas para acabar con este problema de primer orden", por lo que manifestó su deseo de que "todas las administraciones estrechemos lazos y trabajemos mano a mano" para acabar con la violencia machista.
Después de señalar que en feminismo e igualdad, además de en otros aspectos, el nuevo gobierno socialista de Pedro Sánchez ha dado "un ejemplo internacional", Manuel González ha manifestado que "tenemos un Gobierno con el mejor equipo posible para que recupere el papel internacional perdido en los últimos años, que ha despertado la ilusión en la ciudadanía". Una ilusión que se refleja, según el nuevo delegado, en la atención a las preocupaciones de los ciudadanos que -ha asegurado- "serán las de la Delegación del Gobierno".
CON LA MANO TENDIDA
En cuanto a sus relaciones con las demás administraciones autonómica, provinciales y municipales, González Ramos ha tendido la mano "desde ya, para trabajar en todo aquello que sea beneficioso para España y para Castilla-La Mancha y siempre desde la generosidad, la solidaridad y el bien común para esta tierra y para su gente, aludiendo a su "obligación moral" como vínculo entre el Gobierno de Castilla-La Mancha y el de España. "Nos esforzaremos para que ese vínculo sea beneficioso para la región", ha indicado.
Antes de concluir afirmando que le gustaría llegar al final de su andadura como delegado habiendo sido útil a la sociedad, González Ramos se ha referido a los Cuerpos y Fuerzas del Seguridad del Estado como "aliados imprescindibles" para la salvaguarda de la libertad, señalando que "realizan su trabajo con profesionalidad, lealtad y compromiso para garantizar las libertades individuales y colectivas" y mostrando en ese sentido su "sincero reconocimiento y admiración para estos hombres y mujeres".

ESPAÑA NO ES UN DÚO
Por su parte, el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha aprovechado su intervención en el acto de toma de posesión de Manuel González como nuevo delegado del Gobierno en esta región, asegurando que desempeñará su doble función como jefe del Ejecutivo regional y máximo representante del Gobierno de España en la comunidad autónoma defendiendo “los intereses de mi gente” e impulsando la cohesión interterritorial del país.
“España no es un dúo. Aquí hay una orquesta que puede desafinar o que puede entonar perfectamente”, ha explicado García-Page, quien ha hecho hincapié en que “los intereses de Castilla-La Mancha no son contrarios a los de España”. No obstante, ha advertido, si los intereses de la región se contradijeran con los del Estado, “tienen que prevalecer los de España”, aunque “buena parte de nuestros intereses enriquecen la policromía de un país que ha decidido que “todos podamos discutir en función de nuestros ciudadanos”.
NO AL SISTEMA AUTONÓMICO ASIMÉTRICO
García-Page ha rechazado un sistema asimétrico en el que algunos puedan interactuar con el Estado “en primera división y otros en segunda preferente”. "Nos mantendremos firmes en nuestros intereses”, ha recalcado García-Page, quien ha asegurado a González Ramos que el Ejecutivo autonómico “estará a tu lado”, aunque también ha dejado claro que, como región, “no queremos ser menos”.
Además, el presidente regional ha trasladado al nuevo delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha su “enhorabuena en lo personal” y le ha transmitido tanto la “lealtad” del Ejecutivo autonómico como el de otras administraciones y organismos presentes en el acto, como el Ayuntamiento de Toledo, la Fiscalía de Castilla-La Mancha, las diputaciones provinciales o la universidad regional.
AGENDAS DE INTERESES
Después de animar a González Ramos a abrir una nueva etapa fuera del “insulto desde la tribuna política” y acorde con la “carga moral” que entraña ser delegado del Gobierno de España, por la defensa de los valores de la Constitución que implica el propio cargo, el presidente de Castilla-La Mancha ha avanzado al nuevo delegado la confección “a partir de mañana” de una agenda de intereses a tratar con todos los consejeros y ministros del Ejecutivo central.
Una agenda en la que hay “cosas importantes pendientes”, entre ellas, asuntos “pequeños y grandes” y otros “de país” que “tenemos que abordar porque está en nuestra capacidad y en nuestra obligación”, aunque sobrepasen las atribuciones de la propia Comunidad Autónoma o la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha. “No le voy a pedir ni a Manuel González ni a Pedro Sánchez que lo arreglen todo”, ha advertido García-Page, “pero pedimos una actitud de diálogo, de conversación, de escucha y de no sectarismo”.