Jueves 26 de Julio de 2018.
Susana Guerrero ha sido juzgada hoy en el Palacio de Justicia de Talavera de la Reina, acusada de un delito de desobediencia grave por incumplir el régimen de visitas de su hija Nayara con el padre biológico de la niña, de 12 años de edad, por el que el Ministerio Fiscal pide para ella un año y medio de prisión y la consiguiente pérdida de la custodia de la pequeña.
Conforme a lo previsto y como anunciábamos ayer en este mismo diario, la joven madre talaverana que desde hace varios años lucha en los tribunales por la custodia de su hija Nayara frente al padre biológico de ésta, condenado por violencia machista de la que ella misma fue la víctima y al que acusa de abusar de la niña, ha comparecido ante la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Talavera para responder de la denuncia que pesa sobre ella.
DEBER MATERNAL DE PROTECCIÓN
Durante la vista judicial, Susana Guerrero ha tenido ocasión de declarar ante la jueza que, como ha venido manifestando siempre que ha tenido ocasión, su postura de impedir que su hija vea a su padre biológico, al que considera un "depredador sexual" y un "peligro" para la niña después de lo que le hizo a ella, no es más que el cumplimiento de su deber maternal de proteger a su hija.
Hay que recordar al respecto que Susana Guerrero sostiene que desde los 12 hasta los 17 años fue objeto de continuos abusos sexuales por parte del padre biológico de su hija, que tenía acogida a aquélla en su casa tras sacarla del centro tutelar de menores en el que se encontraba tras ser abandonada por su madre; y que, como consecuencia de tales abusos, quedó embarazada de la propia Nayara.
CONFIANZA EN LA MAGISTRADA
A la salida del juicio celebrado en el Palacio de Justicia talaverano, que ha durado varias horas, Susana Guerrero -en la imagen sobre estas líneas, con su abogado- ha manifestado que, "además de largo, ha sido duro" y ha mostrado su confianza en que "la magistrada juzgará con Ley y Corazón, pues la Justicia también se imparte así".
En ese sentido, la joven talaverana -tiene 30 años y quedó embarazada de Nayara con 17 en las circunstancias ya señaladas- ha confesado que, "una vez más, me he sentido escuchada por la magistrada y a estas alturas para mí eso es muy importante".
ECO NACIONAL
Se da la circunstancia de que la jueza que interviene en este procedimiento es la misma que absolvió a Susana Guerrero el pasado mes de abril de la denuncia que contra ella presentó la actual pareja del padre biológico de su hija en el año 2016, por acusarle de presuntos abusos sexuales de los que habría sido víctima la pequeña Nayara.
Antes de su entrada al juicio, Susana Guerrero ha recibido el apoyo de varias decenas de personas que, convocadas por distintos colectivos sociales talaveranos, han acudido a la puerta del Palacio de Justicia, en donde la joven madre talaverana ha sido entrevistada en directo por una cadena de televisión nacional, que se ha hecho eco de su situación personal y judicial.
Reportaje Gráfico, Armando Espejel