Martes 14 de Agosto de 2018.
La red para el diagnóstico de patologías hematológicas integrada por los hospitales General Nuestra Señora del Prado, de Talavera de la Reina; General Universitario, de Ciudad Real; Gutiérrez Ortega, de Valdepeñas; Santa Bárbara, de Puertollano; y Virgen de Altagracia, de Manzanares, dependientes del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, Sescam, ha procesado muestras biológicas de casi 600 pacientes en su primer año de funcionamiento.
Esta red se puso en marcha como un proyecto piloto para trabajar de forma coordinada en verano de 2017 gracias a la adquisición, un año antes, de un citómetro de flujo de ocho colores en el Servicio de Hematología del Hospital de Talavera, lo que supuso dar un salto tecnológico de primer nivel situando al Sescam en los mejores estándares diagnósticos internacionales, según informan desde el propio Servicio de Salud castellellano-manchego.
MÁS CAPACIDAD DIAGNÓSTICA
Gracias a esta iniciativa ha sido posible ampliar la capacidad diagnóstica de los cinco centros implicados, evitando desplazamientos innecesarios a los pacientes y facilitando la labor de los profesionales y la toma de decisiones en cada caso.
Los centros que forman parte de la red remiten al Hospital de Talavera las muestras biológicas del paciente, mayoritariamente sangre periférica y biopsias, para ser analizadas a través de citometría de flujo y poder emitir un diagnóstico. Estas muestras, que son transportadas sin necesidad de contenedores especiales y que sólo han de ser resguardadas de la luz, pueden ser estudiadas con fiabilidad hasta 24 horas después de su extracción.
INCREMENTO PROGRESIVO
Según ha explicado el jefe del Servicio de Hematología del Hospital de Talavera, Fernando Solano, el primer paso fue definir los protocolos y corregir posibles deficiencias, de manera que en los primeros seis meses del proyecto se recibieron muestras de 184 pacientes.
“A partir de enero de 2018 se observa un incremento progresivo del número de muestras recibidas, de manera que hemos pasado de recibir muestras de 56 en el primer mes de este año a casi 100 en el mes de junio”, apunta, sumando un total de 407 en los primeros seis meses de 2018.
ATENCIÓN MÁS ÁGIL AL PACIENTE
En este sentido, ha señalado que “una vez procesamos la muestra, emitimos un informe detallado, con información clínica relevante, y todo ello disponible para los facultativos a través del visor clínico de Mambrino, lo que permite agilizar la atención al paciente, facilitando además la toma de decisiones más rápida a la hora de tomar una decisión sobre el tratamiento más adecuado”.
Solano ha resaltado que esta red de diagnóstico basada en la citometría de flujo permite no sólo el diagnóstico de enfermedades hematológicas, sino también en el caso de las inmunodeficiencias y para el diagnóstico y manejo de las enfermedades autoinmunes, para las que cada vez has más tratamiento biológicos que requieren de una monitorización del paciente mediante citometría.